Tras la rehabilitación o reforma de una piscina, es el momento ideal para empezar a tomar medidas en la línea del ahorro energético de este espacio. Los dispositivos de limpieza, la iluminación o el color de las baldosas, todo ello puede contribuir a reducir tu factura eléctrica. ¿Quieres saber más? En este artículo te explicamos cómo puedes darte un chapuzón sin temer que esto te suponga mucho gasto.
Encuentra la mejor tarifa para ti y ahorra
En ocasiones, los consumidores pagan por un gasto que no realizan porque han escogido mal su tarifa. Se han guiado por los precios más baratos del mercado sin pensar en que cada vivienda tiene unas necesidades particulares, que son las que indican cuál es la mejor modalidad para cada casa. A partir de ahí sí que se puede utilizar un comparador de luz y gas, esta herramienta generará los mejores precios tras haber introducido nuestros datos del suministro. Ten en cuenta que el comparador está actualizado, así que la mejor tarifa de luz y gas de 2019 puede no seguir siendo la más económica ahora mismo.
Una vez que has elegido varias tarifas del comparador que te resulten interesantes, no dudes en estudiarlas más a través de sus webs donde pone toda la información, ya sea Endesa, Repsol, Naturgy… Por ejemplo, antes unirte al club de clientes de Endesa lee atentamente las condiciones de los contratos y la letra pequeña. Tanto Endesa como el resto de compañías pueden tener cláusulas en sus tarifas que se te hayan pasado por alto en un primer momento.
¿Cómo lograr eficiencia en tu piscina?
A continuación, te explicamos qué puedes hacer para lograr que tu piscina sea un espacio de ahorro energético y económico:
Luces LED: al igual que en el resto de la casa, la piscina también necesita su iluminación particular. De hecho, si un lugar como este está mal iluminado aumenta el riesgo de que ocurran accidentes. Por lo tanto, lo primero que ha de hacerse es analizar cuántas luces sería conveniente colocar y después adquirirlas de la tipología LED. Estas luces gastan hasta un 80% menos de energía que las tradicionales y no contaminan. Además, ya hay disponibles de muchos modelos para las piscinas.
Autoconsumo: asimismo, la piscina también puede aprovecharse de la instalación de placas solares. De esta forma, la vivienda no depende de la energía de la red eléctrica sino que consume la suya propia, la que su instalación ha recogido y transformado. Además, esta acción genera más conciencia social entre los usuarios. En el caso de este espacio acuático puede usarse para las luces o para el funcionamiento de los sistemas de limpieza.
Dispositivos de limpieza: hoy en día muchos objetos que precisan de electricidad tienen su certificado energético, como las bombas de limpieza que están presentes en las piscinas. Comprar una bomba eficiente será una buena inversión para ahorrar energía, así como optar por aquellas que se pueden programar.
Cubierta: otra opción para hacer trabajar menos a los sistemas de limpieza de la piscina y para ahorrar es utilizar una cubierta para tapar la piscina. De hecho, una cubierta puede evitar el vaciado y llenado en cada temporada de baño.
Evaluación: por último, para evitar más rehabilitaciones o reformas que cuesten un dineral, lo mejor es evaluar el estado de la piscina frecuentemente. Cuanto antes se localice una grieta o una fuga, menos costará la reparación.
Si quieres conocer otros trucos para lograr la eficiencia energética, esta vez en el interior de tu hogar, no te pierdas este artículo.
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